Mi dia de Metro

Hoy recorrí casi todo el sistema de transporte colectivo Metro (ya que tenia una asignación especifica, pero se acabo convirtiendo en una experiencia personal inolvidable). En fin, estoy cansado, así que empezare a escribir a ver que sale. Mi ruta, la que mi par de compañeras piernas quisieran.

Fue como saber que algo iba a pasar, y no hacer nada para detenerlo. Sin preocupaciones, ni reflexiones profundas.

Fue dejarme llevar por las corrientes calidas de gente que transbordaban en Chabacano, sin negarme y disfrutarlo.

Fue como en cierto punto, perder una pieza de mí y seguir sin darme cuenta. Hasta recuperarla por los suelos al final.

Fue salir de un vagón, entrar en otro, y repetir ese instructivo para armar alguna otra nada, hasta el fin de ese ciclo de krebs naranja.

Fue como conocer otra cara de una ciudad que veo diario, y que tiene una cara completamente distinta por debajo de ella

Fue guardar silencio por momentos, y poner atención afuera, fijarse en uno que otro detalle, y luego seguir para que la atención se fijara en la tarea.

Fue como girar las barras de la salida, sabiendo que indudablemente tendre que regresar pronto.

Fue estar lanzando zarzamoras a las obejas, esperando que les gustara, y las masticaran y masticaran, y luego no se que más…

Fue como chido, y ya. Lo haré otra ves. (Como estar sin muebles y utlizar la cama que es lo unico que tienes)